Películas para Halloween sin miedo IV

Y dedico una vez más un breve momento para esas películas que se pueden ver, para estos días festivos, sin la necesidad de morirte del susto, de ver entrañas ensangrentadas ni nada que se le parezca. De todos modos, esta vez, será un poco más infantil, ya que lo dedico a ese tiempo en familia, para que padres e hijos puedan coger el bol de las palomitas y pasar un buen momento entre fantasmas.

Como verán el tiempo estimado para esta película es breve, además de ameno, se fomenta la relación entre la familia y por unos 96 min. no se está dividida en otras cosas, así pues, aparca lo que tengas entre manos, llama a tu familia y acurrúcala en el sofá. Apagad las luces y abrazaos fuerte, por ahí va mi reseña que espero te animes a

sacarla del videoclub (si es que todavía haces esas cosas).

Casper

(1995)

Director: Brad Silberling

Duración:

96 min.

Argumento:

Casper es uno de esos fantasmas que no han podido ir al más allá por tener cosas pendientes y ansía tener amigos, pero sus malvados tíos disfrutan asustando a todo humano que encuentran. Un día, una ambiciosa mujer llamada Carrigan hereda una mansión maldita y contrata a todo el que puede para limpiar el lugar, pero será un psiquiatra especializado en fantasmas quién perdure más tiempo en la casa para sacar de allí a los fantasmas. Este doctor se llama Harvey y vaya a donde vaya, su hija Kat va con él. Casper ve por fin la posibilidad de tener una amistad y no quiere que sus tíos los asusten para echarlos de la casa. ¿Te animas a averiguar que sucederá?

Casper es una película de aventuras, entrañable y adorable. Una de esas películas que vimos los adultos en nuestra infancia y que muchos no olvidamos y que cuando lo hacemos, revisamos la cinta y nos damos cuenta de que, una vez más, nos ha vuelto a enamorar. Entretenimiento asegurado para toda la familia, que te hace preguntarte si tú serías uno de esos fantasmas con cosas pendientes o si seremos capaces de dejar ir a un ser querido que perdimos. El doctor James Harvey y su hija Kat (una jovencísima Christina Ricci) añoran a la esposa y madre de estos que falleció y tal tema obsesiona tanto al viudo doctor que ansía encontrarla entre todos los fantasmas que encuentre a su paso.

Si en algo disfrutarán los niños con esta película será por el alma bondadosa de Casper, también por los carroñeros tíos que solo piensan en hacer bravuconadas. ¡Diversión! Es lo único que quieren, usar a esos sacos de carne y huesos que son los mortales, para beneficio propio. También les encantarán sus peculiares nombres y las transparencias de estos, que hay que decir, que están muy bien conseguidas. Y para los adultos, descubrir que con el paso del tiempo, vemos esas capas que las películas guardan para darnos otros mensajes que el ojo infantil no puede captar. Y si en algo entiendes de cine, seguro que ves ahí la mano de Steven Spielberg.

Pese a que distinguimos la comedia en esta película de aventuras, una parte de ella embarga la cinta de un pequeño dramatismo, donde la muerte es, inevitablemente, la protagonista, por mucho que la hayan pintado de humor. James Harvey solo desea encontrar a su difunta mujer, Casper se entristece por no recordar su anterior vida y desearía volver a ella y Carrigan… una mujer dispuesta a todo con tal de obtener el mayor dinero posible. Parece que los tíos de Casper: Látigo, Gordi y Tuffo son los únicos que disfrutan de su muerte. Un trío cómico que no te dejará indiferente.

En conclusión, una película divertida, con unos bonitos decorados, una música brillante, un director que supo como coger la cámara y un productor que puso todo su empeño por volver a llevarnos de la mano a la aventura. Casper, el fantasma que quería hacer amigos.